Desde el gobierno de Javier Milei reconocen que la imagen positiva del presidente cayó entre un 4% y 5% en las últimas semanas, principalmente debido al impacto del aumento de tarifas en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Sin embargo, desde la Casa Rosada descartaron un cambio de rumbo y aseguraron que continuarán con la quita de subsidios y la desregulación, con miras a las elecciones legislativas de 2025.
Funcionarios cercanos a Milei afirmaron que la baja de popularidad no está relacionada con el veto a la reforma jubilatoria ni con los encuentros en Olivos con legisladores que apoyaron dicha medida. En cambio, confían en que los efectos económicos a corto plazo revertirán esta tendencia negativa. “Hay medidas que en el corto plazo son impopulares, pero creemos que los resultados económicos las justificarán antes de las elecciones de mitad de término”, comentó un colaborador del gobierno.
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La administración también se prepara para anunciar una serie de desregulaciones antes de fin de año, junto con la publicación de las empresas que se adhirieron al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI). Además, busca disipar las dudas en torno a la inversión de U$S30.000 millones de Petronas para la construcción de una planta de Gas Natural Licuado en Río Negro, asegurando que las negociaciones continúan y la obra se concretará.
En paralelo, planean acelerar la privatización de empresas públicas incluidas en la Ley Bases, y prepara un nuevo programa económico con el FMI, buscando respaldo financiero para levantar el cepo cambiario sin generar un impacto negativo en la sociedad.