Lunes 7 de Abril de  2025
CIENCIA

Cáscaras de piñón: el superantioxidante descubierto por la UNCo

Investigadoras del CONICET y la Universidad del Comahue descubrieron propiedades terapéuticas en residuos del piñón que podrían aplicarse en tratamientos contra el estrés oxidativo.

Escrito en VIRALES el

Un equipo de investigadoras del grupo de Biotecnología Ambiental del Instituto PROBIEN (CONICET-UNCo) ha dado un giro inesperado al destino de las cáscaras del piñón patagónico, semilla de la Araucaria Araucana o Pehuén, tradicionalmente consideradas un residuo sin valor. Los estudios liderados por las doctoras Celeste Gallia, Ana Ferrari y Guillermina Bongiovanni revelaron que estas cáscaras poseen una capacidad antioxidante hasta 30 veces superior a la de la pulpa comestible, lo que representa un hallazgo de alto impacto en el ámbito de la biotecnología aplicada.

Alianza con la industria local y mirada sostenible

El descubrimiento fue posible gracias a una colaboración con la empresa NOUS de Villa Pehuenia, que facilitó el acceso al subproducto para su análisis. El potencial antioxidante de las cáscaras no solo representa una oportunidad para desarrollar nuevos productos de alto valor agregado, sino que también plantea una alternativa concreta para reducir residuos orgánicos de la industria alimenticia. Esta valorización de subproductos naturales se alinea con objetivos globales de sostenibilidad y economía circular.

Aplicaciones terapéuticas y protección celular

Más allá del laboratorio, los extractos derivados de las cáscaras demostraron ser inocuos para las células y mostraron efectos protectores frente a toxinas como el arsénico. En cooperación con la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de Córdoba, se avanzó en estudios con animales: un té elaborado con cáscaras de piñón logró aumentar las defensas antioxidantes en ratas sometidas a quimioterapia. Este resultado sugiere posibles usos en el ámbito oncológico, especialmente para reducir los efectos colaterales en glándulas salivales.

“Estos compuestos tienen el potencial de convertirse en aliados terapéuticos frente a enfermedades relacionadas con el estrés oxidativo”, afirmaron desde el equipo de investigación, destacando el valor del hallazgo.

Desde el corazón de la Patagonia, el piñón vuelve a ocupar un lugar central, no solo como símbolo cultural, sino como recurso estratégico en la ciencia del futuro.